Con la premisa excluyente de evitar el primer paro de ómnibus de 2022 por incumplimientos salariales, el vicegobernador en ejercicio del Poder Ejecutivo, Osvaldo Jaldo, convocó esta mañana a las partes involucradas a una reunión clave en la Casa de Gobierno.
Durante el encuentro, Jaldo dialogó con representantes de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) y la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat), y las conversaciones fueron fructíferas. Este mediodía se garantizó la circulación de colectivos en la provincia y, por lo tanto, no se realizará la medida de fuerza anunciada para el martes.
De acuerdo a lo informado desde Casa de Gobierno, se adelantarán los subsidios y los fondos servirán para que los empresarios puedan saldar la deuda con los 3.400 choferes, correspondiente al salario de enero. También estaba pendiente una suma de $5.000 del año pasado.
La Nación giraría los subsidios a partir del jueves. Del total, más de $310 millones son para Tucumán. Además, señalaron que la reducción de los fondos prometidos para las provincias es una consecuencia del rechazo que sufrió el Presupuesto 2022.
Qué había sucedido
UTA había anunciado una huelga por tiempo indeterminado. Tanto dirigentes del gremio como empresarios de Aetat coincidían en que la raíz de este problema es que la Nación está teniendo demoras en el giro de subsidios. Ante este panorama, Jaldo citó a las partes a Casa de Gobierno, y finalmente se logró desactivar la medida de fuerza.